sábado, 6 de junio de 2009

En el principio fue la distancia












Los políticos y los medios de comunicación tratan de conducirnos como a un rebaño al redil de lo políticamente correcto, creando así un mundo alternativo donde reina la alienación que les conviene, algo así como el mundo feliz de los teletubbies. El "Matrix Progre", lo llama el escritor Juan Manuel de Prada, haciendo gala de su habitual agudeza.

Y en en él se considera una aberración afirmar cosas del tipo que los hombres y las mujeres somos distintos. Hay que defender que somos iguales, sea cierto o no. Por eso es quiero empezar el blog desterrando esa falsedad contraria a la ciencia y la evidencia. Los hombes y las mujeres somos seres de la misma especie; por tanto, genéticamente casi idénticos. Pero es obvia una pequeña diferencia (al menos la física, pongamos, de un 5%, por dar un porcentaje).

Estoy convencido de que si la irrealidad "bienqueda" estilo Jordi González en la que vivimos contiúa su ascendente espiral, en unos años alguien será capaz de afirmar que también somos del todo iguales físicamente. Pero bueno, hasta el día de hoy parece que se acepta que a los niños podemos enseñarles que papá y mamá tienen cositas distintas colgando.

Y si es así: ¿acaso es descabellado pensar que nuestra psique se diferencie también, por ejemplo, otro 5%? Un 5% que, igual que físicamente nos permite complementarnos, aparearnos y reproducirnos, mentalmente es suficiente para provocar la mayor parte de nuestros desencuentros. Y que conste que no hablo de que unos sean mejor o peor que otros; sólo de diferencias.

Por eso a veces intentamos comunicarnos entre sexos pero no nos entendemos, como si comprendiéramos los significantes pero no los significados o la frecuencia en la que hablamos no fuera la misma. Ello causa problemas de pareja, dificulta la solución de los mismos y, sobre todo, provoca multitud de obstáculos en el camino de la seducción. Especialmente para los hombres, que suelen ser los que deben tomar la iniciativa, pero también para las mujeres.

Además, los mecanismos de atracción también han sido falseados. Olvidando los reales, la educación y los medios de comunicación nos programan artificialmente con los rasgos que en teoría resultan (o deben resultar) atractivos. Pero luego gustan individuos con otras caracterísitcas, lo cual crea conflictos y crisis tanto en la otra persona (que no entiende nada) como internas en uno mismo (que se siente culpable); y también, claro, multiplica las infidelidades...

Aceptar todas estas realidades corroboradas por la ciencia podría ser, precisamente, el comienzo del acercamiento entre sexos y la solución a muchos problemas. Aunque suene paradójico, reconocer nuestras diferencias haciendo frente a la correción imperante, podría suponer el comienzo de una relación más fácil (por realista) entre hombres y mujeres. Mucho más que empecinándonos en negarlas y lastrando los problemas que acarrean.

Llegados aquí, sólo queda una pequeña puerta que abrir antes de empezar: tengo muchas respuestas, pero al ser chico, no tengo claro en qué orden exponerlas para ser lo más claro posible (en el blog para ellos no me encuentro con ese problema).

Así que en gran medida me organizaré en torno a dudas y consultas, de las que he recibido antes o de las que me vayáis haciendo. Para ello, podéis contactarme por e-mail, facebook o con comentarios en este mismo blog. Si alguien me escribe en privado garantizo confidencialidad; y si decido utilizar su duda como introducción de un escrito, siempre se lo consultaré antes, especificando además si puedo utilizar su nombre o algún nick que prefiera.

Besos a todas,

Alfred

seduccionpractica@hotmail.es
Facebook "Alfred Pletora"

3 comentarios:

  1. El 5% que suele ser suficiente para saber que hay diferencias, reconozcamos que no siempre es verdad. Se hablan barbaridades de todo tipo tanto acerca del hombre como de la mujer, pero lo que resulta cierto es que pocos hacemos caso de las verdades, muchas mujeres aseveramos y queremos mantener junto a los hombres somos iguales y por otro lado muchos hombres aseguran que no lo somos y que estamos para una sola tarea(que me parece más bien enfoque machista).
    Ocurre, que como has dicho, nos adjudicamos el papel que nos han dado ó el que nos ha resultado más fácil de aprender.
    Saludos.

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  2. Hablar de diferencias, sea en la cantidad o porcentaje que sea, no supone ningún tipo de superioridad o inferioridad de unos respecto a otros.

    Sólo significa que la evolución nos ha hecho desarrollarnos en espirales distintas que se han ido alejando y que hoy causan nuestros desencuentros.

    Y estamos aquí para intentar que esas dos espirales se enreden ;-)

    A.P.

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  3. Hola
    Alfred
    Sobre el tema de Nociones de Estetica
    me parece q hubieses hecho una descripcion mas detallada , apreciastes los imperfectos
    pero creo q nos deberias decir q talla exactamente media o al menos un aproximado, y cuanto pesaba, para asi ya q las prendas q uasaba si no le hacian bien, entonces podriamos sugerir q prendas le quedarian mejor
    pero haber si nos dices su talla aproximada y su peso y su cabello q color era teñida o natural?.
    dijistes talla mediana pero no cuanto, delgada pero no cuanto pesa, claro q no te exigimos exactitud pero q si te arriesgues a darnos una cifra.
    Att Brisa
    brisamanases@hotmail.com

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